lunes, 19 de julio de 2010

Receta para elaborar tu propio gel antibacterial casero

Debido a la escasez y encarecimiento de los productos de limpieza por la influenza porcina (Influenza H1N1 A) te decimos como elaborar tu propio gel antibacterial para lavar y desinfectar correctamente tus manos.
Con este alcohol en gel ahorraras hasta un 50%, comparado con el precio comercial y sólo necesitas unos cuantos minutos para elaborarlo.
Ingredientes:
  • 6 cucharadas o 90 ml de alcohol etílico (etanol al 72%)
  • 3/4 de cucharadita de carbopol
  • 1/4 de cucharadita de glicerina pura
  • 1/4 de cucharadita de trietanolamina
Todos estos ingredientes los consigues facilmente en cualquier farmacia.
Utensilios:
  • Tazón de vidrio con capacidad de 1 litro
  • Colador de malla fina
  • Flanera o recipiente chico de vidrio
  • Agitador de globo
  • Envase de plástico con tapa de botón a presión con capacidad de 100 ml.
Preparacion:
Coloca el colador de malla fina sobre una flanera o recipiente chico de vidrio, vierte el carbopol sobre el colador y deshaz los grumos con ayuda de una cucharita a fin de pulverizarlo completamente.
Vierte el alcohol en el tazón y agita con el globo fuertemente mientras agregas poco a poco el carbopol.
Agrega la glicerina mientras agitas suavemente con el globo.
Cuando se haya disuelto por completo el carbopol y no se aprecien grumos, agrega la trietanolamina, mientras agitas suavemente. En ese momento se formará el gel.
Vierte el alcohol en gel en la botella de plástico y tape firmemente.
Para usar el gel antibacerial se deben lavar las manos utilizando agua y jabón líquido, frotándolas por lo menos durante 20 segundos. Enseguida enjuagar, secar y aplicarlo. Utilizado de esta manera darás la mejor protección frente a cualquier bacteria y virus.
Si lo usas en la calle y no es posible lavarte las manos, aplicar sobre una palma y luego frota las manos, cubriendo principalmente ambas palmas y yemas de los dedos. Deja que se seque sin agitar las manos.
Para la conservación del el antibacterial, se recomienda mantenerlo en un lugar fresco y seco, para evitar la evaporación del alcohol, que es el ingrediente germicida.
Comparta esta informacion via email, facebook, web o blog, con amigos, vecinos y familiares para que mas personas puedan conocer y tomar las debidas precauciones y medidas preventivas adecuadas en todos los paises:
http://melatico.wordpress.com/2009/05/01/receta-para-elaborar-tu-propio-gel-antibacterial-casero/

lunes, 5 de julio de 2010

Contrariedades-Alejandro Renteria

El día que decidí cortarle la lengua porque nunca paraba de hablar, tomo un cuaderno y comenzó a escribir.

Rendención- Eduarto Torres

Solo un minuto de
ignorancia,
es lo que nos salva de la
locura.

Estuviste aqui-Alejandro Renteria

Estuviste aquí,
después de cien lunas de no pisar el zaguán con tus pies livianos.
viniste disfrazada de cierzo y distancia,
de páramo yermo, de vacío.

Y tus muslos suaves,
y blancos pechos
y delgado cabello,
toda tu,
erigida patrona de los desgraciados.

La última vez,
me pareció más original tu disfraz,
menos bucólico,
menos pedestre,
oliendo a flor se azar.

Ahora la faz, más bien ordinaria, causa pena.

Se termino tu eternidad,
tu llanto se suelta porque no lo sabes todo,
porque al final, solo se trata de rozar la piel,
y lo sabes,
pero no lo has sentido.

Talvez,
mis ojos torpes,
no poseen la cualidad del optimismo esperanzador,
pero quizá si llegara a rozar tus muslos lo comprenderías.

Hay 2 cosas necesarias para volar - Alejandro Renteria

Llego a la ventana el cuervo de Poe, negro, como todos los cuervos y feo como todos
los cuervos.

Y antes de que me dijera nunca mas, le pregunte, aunque sabia que ya no lo hacia, la formula infalible para volar.

Solo necesitas dos cosas, para lograr lo que deseas, -me dijo- es sencillo:

-Unas alas y saber volar.

Si no tienes alas ni sabes volar, en verdad no se como ayudarte.

Se ha mudado-Alejandro Renteria

Si viene a buscarme cuéntale,
que los olores a canela y arroz se han marchado,
que doblaron la esquina,
que aceleraron el paso y que vuelven cada mañana para
reconstruir esta fábula destruida.

Cuéntale que el gato murió, o se fue, da igual, lo desconozco,
(eso lo espera, siempre dijo que no era capaz ni de cuidarme solo)
se llevo su cajita, su arena,
sus latas, su collar, su estambre.

Que he berreado desde entonces, con la panza, con los pies,

con la nariz, tirado al suelo, llorando mientras lloro;
que ya estoy seco,
como la galatea, que murió en su maceta igual que yo, seca,
y que a su procesión asistieron tristes las hormigas,
que vivían felices cuando ella también lo hacia.

Que has visto el refrigerador semivacío;
siguen acompañándolo las dos cebollas, tres papas y dos tortillas
de siempre, de antes;
de antes cuando estaba ella,
cuando todo era sobresalto,
pasión, ocurrencia, escape.

Cuando el cereal bastaba, cuando las palabras eran suficientes para
alimentar la espera,
cuando el invierno era calido,
el verano fresco,
y en el otoño lo único que caía era ella sobre mi.

De cuando la sangre hervía, como hervía el café en la estufa,
previa cita al lienzo blanco, hoja de papel o rollo virgen;
que ahora me cuesta mas trabajo levantarme y menos esfuerzo dormir.

Si viene a buscarme cuéntale que ya no estoy;
disculpa Inspiración,
ya no vive más aquí
se ha mudado.

No Te Salves- Mario Benedetti

No te quedes inmóvil
al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo

pero si
pese a todo
no puedes evitarlo
y congelas el júbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados
pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil
al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo.